Depósito de locomotoras, años 30
Depósito de locomotoras, años 50-60
Vista aérea de las instalaciones, años 80
Plano original del "Puente Giratorio"
5 - Puente giratorio y vista general de edificaciones y vehículos
Continuamos viaje por el camino arbolado que discurre en
paralelo a uno de los laterales del edificio de la Rotonda,
para desembocar en el "Puente Giratorio" de 23 metros de
diámetro aún en uso. Fue construido en 1917 por la antigua
compañía ferroviaria MZA. Aunque algunos de los puentes
existentes se movían de forma manual, éste lo hace mediante
un motor eléctrico que se acciona desde la caseta situada en
uno de sus extremos.
Los 23 metros de longitud fueron suficientes hasta los años
treinta para dar la vuelta a las locomotoras e invertir el
sentido de la marcha y colocarlas en la vía adecuada, pues
las máquinas de vapor sólo podían circular en una dirección.
A partir de entonces se fabricaron máquinas de mayores
dimensiones, lo que generó graves problemas en la mayoría de
depósitos para mover las grandes locomotoras, llegándose a
construir puentes giratorios de hasta 30 metros.
Desde esta zona del antiguo Depósito de Vapor de Vilanova i
la Geltrú, que estuvo en funcionamiento hasta 1967,
observamos la imponente presencia del edificio modernista de
la Rotonda. Custodia la colección de vehículos más antigua y
valiosa del Museo. Formada por 54 ejemplares, destacan las
25 locomotoras de vapor. Una de las colecciones más
completas de Europa, ordenada cronológicamente, lo que en
líneas generales se corresponde con su tamaño. A través de
ellas, es posible transitar por la historia de la tracción
vapor desde sus orígenes hasta su clausura, así como la
evolución de las condiciones de trabajo de los ferroviarios
y del transporte de viajeros.
Además de las locomotoras de vapor, se conservan máquinas
diésel y eléctricas, vehículos ferroviarios de diferente
tipología, destacando también el conjunto de coches de
viajeros situados al comienzo del edificio de la Rotonda.